COMPARTO ESTE SITIO DE CUBA DEBATE. UNA AGENCIA DE PRENSA QUE JAMÁS NUESTRA BASURA MEDIÁTICA SE PERMITE LEER Y MENOS REPRODUCIR. CAPAZ QUE LES LIMPIA LAS LEGAÑAS MENTALES. 
Y ESO, TAMPOCO…

Pero antes:

SEREMOS EL FUTURO…
SI NOS DESHACEMOS YA DEL IMPERIO PRESENTE

Ya era tiempo de que Rusia y China la paren el carro al imperio gringo. América Latina es muy débil diplomática y militarmente porque su Diplomacia y sus FFAA, tradicionalmente elitistas pues que sus miembros y funcionarios han salido de sus altas clases dirigentes económicas y feudales, de igual manera tradicionalmente sumisas a los EE UU por sus intereses capitalistas, no sociales ni culturales, y que jamás recuerdan que los Patricios y Clases Medias de hoy son nietos de los héroes y soldados de ayer, ni que los gringos fueron siempre enemigos nuestra Independencia, como lo son hoy de nuestra incipiente Libertad.

Europa es sumisa a su Antigua Colonia del norte porque en favor de ella vieron decaer su poderío imperial e imperialista, y los consideran sus herederos naturales. Europa se concentró en explotar sin misericordia al África y en cultivar sus viejas rencillas religiosas y familiares. No en vano son calvinistas codiciosos. Y al resto del mundo poco le importamos.

África es un continente devastado en su humanidad y en sus riquezas por la codicia calvinista europea, que ha dejado solo hambre, miseria, desigualdad y luchas más feroces que las viejas guerras tribales, porque están percudidas de capitalismo ambicioso y de religiones monoteístas distintas de sus mitos ancestrales. Y sus recursos naturales minerales, abundantes pero en poder de las corporaciones occidentales, están sobre explotados y apenas son suficientes para la codicia corporativa. El resto es el desierto del Sahara y las inextricables selvas del África central, casi inexpugnables a no ser que las talen y las conviertan en desierto también. Pero eso es demasiado costoso para la enflaquecida economía europea.

Australia es un inmenso desierto con un borde hermoso y casi civilizado en su perímetro, más la barrera de coral que ya casi destruye el capitalismo a punta de polución, contaminación y degradación del mar adyacente.

Pero Rusia y China, las potencias emergentes del momento actual, son viejos Imperios que han superado su ambición de dominio territorial por el intercambio comercial y cultural civilizado. Saben bien que en las guerras solo ganan los industriales y comerciantes de armas y pierden la Cultura, la Ciencia benéfica (esa misma que hoy nos hace falta en Occidente y en Oriente ha podido combatir la Peste) y la Civilización humana. Y saben, como lo sabe EE UU, que América Latina es el futuro de la humanidad.

Por cierto, tanto China como Rusia han declinado en gran medida su viejo Comunismo burocrático, que fue necesario para construir su nuevo rumbo y su importancia en el Mundo, y para consolidar una cultura de la solidaridad, el colectivismo y la disciplina personal, sin el egoísta individualismo occidental, y hoy se han acercado a un cierto Socialismo de Mercado no libertino pero sí de libre intercambio de bienes y servicios con el Mundo. No invaden Países. Les compran y les venden. Las condiciones, son negociables.

Europa y el consumista Imperio gringo, casi han agotado ya sus recursos naturales, que en Europa no fueron lo suficientemente abundantes para durar más de lo que les han durado, pero que les sirvieron para edificar una arquitectura maravillosa y un arte inmortal, que hoy les sirven de Recurso Histórico.

En EE UU dilapidaron sus Recursos Naturales, super abundantes, en consumismo superficial innecesario, y hoy ya les escasean. Y como es un Imperio agresivo y violento recién llegado a la Historia con las armas más sofisticadas imaginables, los quieren arrebatar al Sub Continente que los tiene en abundancia, en lugar de comerciar con nosotros como cultura civilizada. Pero no se le puede pedir civilización a una cultura de muerte que emergió del genocidio de los primitivos habitantes en lugar de aprender de sus sabidurías, y tiene como sus héroes históricos paradigmáticos por cinematográficos, a Pat Boone, Wild Bill Hicock, Billy the Kid, los hermanos James, a los hermanos Dalton y escasamente a Búfalo Bill, el mata indios y mata búfalos más famoso del Oeste. Cuando no a Al Capone, Dillinger y los mafiosos de la Era de la Prohibición. Esos son sus paradigmas y arquetipos. Por eso eligen como presidentes a gentuza violenta, injerencista y abusiva como Teddy Roosevelt, Ronald Reagan, los Bush y hasta un idiota con drones como Donald Trump. Una Cultura Disney/Hollywood produce más marines que filósofos.

América Latina es la Reserva de la Humanidad. No alcanzaron los europeos a robarse todos nuestros recursos y, por fortuna aunque arda reconocerlo, al revés de la invasión de peregrinos genocidas en el Norte, aquí nos  llegaron dos Imperios un poco más humanos como el Luso y el Hispano, que no solo trajeron arcabuces, viruela y sarampión sino también un idioma unificador puesto que el portugués es algo así como un español antiguo con mala ortografía, además de una libido algo exaltada por la permisividad católica –distinta del moralismo cutre y fanático del protestantismo de los peregrinos puritanos– y cuyo resultado fue un mestizaje moderno, incluyente a pesar del racismo que aún perdura y que no es solo de los blanqueados sino de los aindiados también. Eso se está decantando y llegará a convertirse en una Cultura Moderna IndoAfroHispana, unificada por el idioma y por costumbres semejantes aunque no iguales, y producirá un Sub Continente rico, políticamente unido, socialista y humanista, muy lejos de la codicia calvinista y de la resignación acristianada de nuestros ancestros aborígenes.

Que no olviden los extemporáneos resentidos a ultranza, que España no fue solamente Almagro, Benalcázar, Pizarro y Orellana, sino también Nebrija, Cervantes, Lope, Velázquez, Calderón, Garcilaso, Teresa, Góngora, Quevedo y el Greco, para nombrar unos pocos contemporáneos de Benalcázar y Pizarro.

Por cierto, y eso nos hace codiciables y víctimas si nos dejamos, aquí tenemos de sobra agua, oxígeno, madera, biología, agricultura, minerales e hidrocarburos para garantizarnos mil años de progreso y bienestar, reduciendo el consumismo y el abuso con la naturaleza, limitando nuestros apetitos a lo necesario para una vida digna, y sin tener, como Europa y el Imperio del Norte, los ojos puestos en la acumulación absurda e inútil de riquezas que desaparecerán como el humo fuera de la chimenea, sino, al contrario, en el acopio de Saberes, Ciencia y Humanismo.

Para eso nos tenemos que desprender ya de la influencia nefasta del cristianismo CatoCalvinista y del Imperio del Norte, y empezar a edificar nuestro futuro sobre las maravillosas bases materiales y espirituales que tenemos, acudiendo a la Educaciún, a la Ciencia y al esfuerzo por mejorar sin las taras heredadas pero sí con los bienes intelectuales que también heredamos, ya sea de Hispania o del Tahuantinsuyo.  


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